San Juan Puerto Rico- Como parte de su compromiso con los miembros de la Policía de Puerto Rico, el gobernador, Pedro R. Pierluisi, convirtió en ley el Proyecto de la Cámara 1119 que enmienda la Ley de Máquinas de Juegos de Azar de 1933 y destina recaudos para el retiro de los miembros de la Uniformada.
“El Proyecto de la Cámara 1119 es un primer paso en la dirección correcta para continuar estableciendo medidas que alleguen fondos al retiro de nuestros Policías. Desde el primer día he defendido el retiro de nuestros oficiales que día a día arriesgan sus vidas para que los ciudadanos estén seguros. Nuestra Policía puede confiar en que continuarán contando con mi apoyo”, reiteró el gobernador sobre la medida avalada por el director de la Junta del Sistema de Retiro, Luis Collazo.
Precisamente, Collazo comentó que la medida “tiene un fin loable de allegar fondos adicionales para el ya aprobado y vigente Retiro Mejorado de los Policías y promueve la política pública de continuar haciéndole justicia a nuestros servidores públicos”.
De los $250 anuales que los mayoristas de estas máquinas, dueños de negocios fabricantes, distribuidores y proveedores pagarán a la Comisión de Juegos, y una vez el dueño mayorista cumpla con ciertos requisitos, incluyendo que tenga sus máquinas conectadas al Sistema de Interconexión Interno, la Comisión destinará $75 al Retiro de la Policía. Este dinero, remitido al Departamento de Hacienda, se depositará en un fideicomiso para cumplir con los fines establecidos en ley. A su vez, cuando el importe por las licencias de máquinas de juegos de azar en ruta sea $1,500, el Retiro de la Policía se nutrirá con $450.
Según se detalla en la ley, la distribución del ingreso de la operación de estas máquinas deberá ser de un 22.5 por ciento para la Comisión de Juegos de Azar y de un 77.5 por ciento a ser repartido en partes iguales entre el dueño del negocio y el dueño mayorista de las máquinas (luego de que se descuenten de dicha cantidad los gastos de interconexión interna y los operacionales del dueño mayorista).
Precisamente, el dueño mayorista será la persona responsable de la distribución de todo el ingreso generado por las máquinas de juegos de azar y de reportarlo quincenalmente a la Comisión de Juegos. La información enviada será verificada con la recopilada por los Sistemas de Interconexión.
Por lo tanto, el 60 por ciento del 22.5 por ciento de los ingresos generados serán destinados como aportación al Retiro de la Policía, un 35 por ciento al Fondo de Reingeniería Municipal y un cinco por ciento a la Comisión de Juegos.
Se desprende de la ley que ninguna persona operará máquinas de juegos de azar sin que cada una de estas posea una licencia y marbete debidamente emitidos por la Comisión de Juegos de Azar y sin estar conectada a los Sistemas de Conexión Interna de cada dueño, mayorista u operador. Además, la Comisión tendrá 60 días improrrogables para aprobar un reglamento y establecer los requisitos técnicos de certificación e interconexión interna de los dueños mayoristas y una vez concluya este periodo de tiempo los dueños mayoristas tendrán 90 días subsiguientes para adquirir y comenzar a interconectar sus equipos por medio de los proveedores autorizados.
Mientras, el Departamento de Hacienda deberá, en un periodo de 30 días, certificarle a la Comisión de Juegos, las licencias vigentes de máquinas de entretenimiento de adultos para el año 2018, incluyendo el nombre de la persona natural o jurídica a la que se le otorgará dicha licencia.
En lo que fue el Proyecto de la Cámara 1119 se estableció que el costo de cada licencia de máquina o renovación será de $250 más, sin embargo, se determinó un periodo de transición para conectarse a dichos sistemas, el cual será de un año a partir de que la Comisión de Juegos certifique a los proveedores de sistemas de interconexión y luego que los dueños mayoristas hayan escogido el sistema certificado a ser utilizado.
Durante este tiempo, el costo de los derechos por licencia o renovación será de $250 pero los operadores que no se hayan conectado, luego de culminado los 90 días de adquisición de los sistemas, y que no hayan demostrado acuerdos-facturas o contratos de interconexión, deberán pagar $1,500 de licencia por cada máquina instalada y operando durante dicho tiempo. En caso de que se haya demostrado, luego de pagar $1,500, la interconexión de una de las máquinas antes de culminar el periodo de transición, se tramitará un crédito de $250.